', ' ❱'); } ?>
Compra. Se acercan los Sanjuanes
La Compra es un recuerdo de lo que fue una vez. Este acto festivo tiene su origen en la compra de los toros por parte de las Cuadrillas a las ganaderÃas bravas que habÃa entonces en Valonsadero. Esos toros, una vez elegidos por los Jurados se lidiarÃan y matarÃan el Viernes de Toros. Hoy, este acto se ha perdido. Las Cuadrillas compran los novillos a través del Ayuntamiento en ganaderÃas de fuera de Soria. De todo esto, ha surgido un nuevo festejo que poco a poco va tomando forma, el Desencajonamiento, que no es otra cosa que la llegada de los toros desde su ganaderÃa a los corrales de Cañada Honda.
La Compra. Un acto simbólico lleno de fiesta
La Compra, al igual que el Lavalenguas y la Saca, se celebra en el monte Valonsadero. En la mañana del segundo o tercer domingo del mes de junio (depende del año) los sanjuaneros se acercan a Valonsadero a pasar un dÃa grande para Soria. A primera hora, mientras los chiringuitos y grupos de gaiteros ponen la banda sonora, los caballistas van encerrando a los toros que andan sueltos por los corrales de Cañada Honda en los toriles para soltarlos a eso de las 6 de la tarde. La noche anterior ha sido larga debido a la fiesta por verbenas y bares. A primera hora de la mañana, «procesión» de coches hasta Valonsadero y allÃ, seguir la juerga o echar una cabezadita a la sombra de un roble. Los más veteranos preparan el almuerzo en parrillas antes de bajar a la Cañada. Otros, toman posiciones en los chiringuitos. La mañana pasa. Valonsadero poco a poco se va llenando de gente. Soria huele a fiesta, huele a monte.
Las Cuadrillas toman de nuevo el protagonismo. Un poco antes del inicio de la Compra, las Cuadrillas, acompañados de coches y motoristas salen hacia Valonsadero. Si no tienes coche, el ayuntamiento te pone autobuses, no hay excusa. El ambiente a esa hora, a eso de las 6 es espectacular. Cañada Honda está a rebosar. Música, gentÃo. A las 6 se celebra el acto simbólico de la Compra y los toros comienzan a salir de los toriles para convertirse, una vez más en los protagonistas absolutos. Ya sólo quedan unos dÃas para que Soria entera estalle en alegrÃa, para que se convierta en una bacanal.